viernes, noviembre 08, 2024

DARRERE UNA NENA

"Darrere una nena" és un text creat a partir de la notícia de la tracta de menors en Murcia i que la periodista Cristina fallarás denuncià a l'article "Hombres ricos compran niñas para violarlas". Aquest poema ho inclouré al projecte "Indoeuropeu de cops", pel qual el Govern d'Andorra i Faberllull m'han atorgat una residència artística a La Massana.


DARRERE UNA NENA

Per què

darrere una nena

hi ha un fil

de baba,

un queixal

groc,

una tomba

amb fam de segles;

darrere una nena

hi ha un dòlar

sense dol,

un anell

papal,

un rengló

i cap dels déus

als quals pregues;

per què

darrere una nena

hi ha una vara

èbria de jutge,

hi ha un pare

i el seu panteix

                                    prin-

                                                         gós;


darrere una nena,

una hiena que té

la cara que torna

l’espill del teu veí;

darrere una nena

(darrere una nena!),

la mà freda

de l’Edat Mitjana,

l’alé d’Apol·lo

al seu bescoll

i un signe –per què-

un signe molt negre

d’interrogació

?









martes, septiembre 17, 2024

LA CANCIÓN DE LA CHICA CHEIW : ¡PRESENTAMOS POEMARIO!

Casi sin darme cuenta, saco nuevo libro.

Presentamos el próximo viernes 20 de septiembre en el seno del festi Xiriapop, con dos estupendas
acompañantes: Rosalía Fernández Rial y Silvia Tasende.

¡Cantemos!









lunes, junio 03, 2024

ALLÁ VOY, FESTIVAL FRONTERAS (14/06)

El viernes 14 de junio estaré recitando por la tarde en Les arts, en el seno del Festival Fronteras,Festival Fronteras, junto a la poeta Berta García Faet y acompañada por la cellista Isabel Villanueva.

Esto, claro, nunca se repetirá.







domingo, mayo 05, 2024

BAILES EN LA TUMBA DE MI MATERNIDAD

El universo me dijo que eligiera:

-Sé madre sola
o mete la cabeza en el horno.

¿Sabéis que hay bocas que rezan 
por las poetas sin descendencia?

En fin, fui al IVI con mi hermana
después de que un hombre 
me dejara en la víspera 
de mi cumpleaños.
Como regalo de cumpleaños me hizo
un masaje de pies.

Luego: 
Prueba reserva ovárica.
Receta ácido fólico.
Hermana guardándome el secreto 
pasada ya la edad de Angustias Alba.

La mañana del 11 de febrero de 1963, 
Sylvia Plath se despierta,
prepara el desayuno para sus hijos 
y se quita la vida 
metiendo la cabeza en un horno 
tras abrir la llave de gas.

En cada Comunidad Autónoma, 
las reglas para ser madre suelen variar, 
pero, por lo general, existen 
una serie de requisitos.
El primero, que no menos importante, 
es que la mujer debe ser menor de 40 años.

Un conocido será padre a los 50 años.
Mi tío Enrique fue padre segundo a los 70 años.
[AQUÍ VA UN UNIVERSO DIFERENTE
QUE APRIETA BIEN LA BOCA].

En 2019, yo rozo los 42.
Un hombre que asegura ser mi amor
me deja sin previo aviso.
(El aviso es, en verdad, su violencia).
-Quiero tener un hijo contigo -le aseguro,
porque el universo me lo ha dicho.
-No recuerdo esta conversación -me dice
aquel hombre con cara de bruma
o camino polvoriento.

Por la calles, todos los paneles
rezaban ofertas y alegría placentaria.
Ser madre sola sonaba a sueño,
a juego al que poder jugar
por no perder la cabeza en un horno.
Se sostuvo la historia apenas un mes.
Cancelé las citas por indisposición de mente.
Lo entendieron, fueron amables.
El hombre con cabeza de río turbio
me impedía ser madre.
La devastación no me cabía en el cadáver.
Me di por muerta.
Una muerta no tiene descendencia
a menos que se considere como tal
larvas de mosca.

Emily Dickinson no produjo hijos.
Ernestina de Champourcín no produjo hijos.
Gloria Fuertes no produjo hijos.
Hay bocas arrugadas
que ponen oraciones en la memoria
de todas las poetas que no fabricaron hijos
con un persigno muy católico.

Dejemos hoy, aquí, entonces,
un ramo en la tumba de mi maternidad.
He salido a la vida y he bailado.
Justo ahora aparezco en mi foto sonriendo.
No pido oraciones. Marchad a misa.
Me basta la vértebra que me sujeta.
Yo rezo ahora
por las caras del río turbio,
por las manos del camino polvoriento,
por las bocas del cerdo lechal.

[AQUÍ VA
UNA BRISA DE SOLEDAD QUE CABE EN EL PECHO
A PESAR DE LAS LARVITAS].

La tumba de mi maternidad
pueda ser
una pista de baile.



lunes, marzo 11, 2024

PANQUE FEST: PEQUEÑO FESTIVAL SOLIDARIO GATUNO

Desde Panque Prods lanzamos la iniciativa de este pequeño festival de música benéfico.
El 15 de junio en The Hops, Patraix (Valencia), a partir de las 19 horas, estarán tocando las bandas
Todo lo recaudado dela entrada (8 euros) será íntegramente donado a la Colonia de Gatitos de Ruzafa e incluso hay una fila 0 para  aquellas personas que no puedan asistir pero sí quieran aportar (bizum a 687 88 02 95, teléfono de al protectora; aporte libre con el asunto "Panque Fest").



sábado, enero 13, 2024

MONTY VINO A MÍ: IMPRESIONES SOBRE UN ENSAYO DE MÚSICA ROCK Y GÉNERO


Se suele pensar que los círculos rock -espacios culturales y de libertad- están exentos de machismo, a salvo del alien; eso que sentimos tan ajeno los "seres de cultura".
Recuerdo que, en un festival pequeño y autogestionado en Sueca, tras el concierto de una banda amiga, obligué a un miembro del público a pedir perdón a la cantante por un comentario. Todo el mundo lo escuchó pues lo había lanzado al silencio tras el final de una canción. También la expareja de la cantante lo oyó, pues tocaban juntos en el mismo grupo y se hallaban ambos en el escenario. Aquel hombre, aparentemente cisgénero, espetó: "¡Que se baje el volumen el guitarra y que se suba la falda la cantante!". No fue fácil, para mí, aproximarme al individuo -repito, que muchos reprobaron el comentario pero nadie hizo nada al respecto-; cuando corregimos una actitud violenta, por ejemplo, un piropo de un extraño, las mujeres nos exponemos a nuevos ataques. Lo hice, me armé de valor. La cantante luego me confirmó que se había disculpado con ella. Ahora me alegra haberlo hecho y me extraña que el resto callara.

El diablo vino a mí, de Monty Peiró (Saigón editorial, 2023), es el ensayo que yo estaba esperando. A lo largo de mi
vida de música, o simplemente "de mujer", he sufrido innumerables momentos como el relatado y observado actitudes agresivas hacia mí o mujeres de mi entorno: en el trabajo, en recitales de poesía, en entrevistas, en supuestas zonas de seguridad entre amigos o en pareja. Las palabras de Peiró llegan para identificar, nombrar y, después, hallar cierta paz (la autora misma comenta que redactarlas la han ayudado con un síndrome que nos persigue a muchas: el de la impostora). Me muestran con  una voz científica (la de una psicóloga y antropóloga) y con una voz testimonial (la de la música que ha vivido situaciones horribles en su propio cuerpo -el cuerpo cobra mucha importancia en el texto, por cierto-) que el patriarcado actúa en todos los niveles. No, señor, el  musical no está a salvo. 

"Yo no soy machista, yo soy culto, yo leo" no sirven de una mierda. Una expareja músico alardeaba de feminista y me tuvo en una relación durante cuatro años machacándome para, al final, abandonarme en un párquing de un centro comercial (todo esto inspiró mi libro Curso avanzado de perra). "Yo no soy machista, yo soy culto, yo leo" debe de decir todas las mañanas la eminencia Arturo Pérez-Reverte, pero luego escribe textos en los que exuda machismo como "Mujeres como las de antes", cosificándonos y pidiendo un tiro de gracia si no tenemos el aspecto requerido: https://arturoperez-reverte.blogspot.com/2013/02/mujeres-como-las-de-antes.html 
"Yo no soy machista, yo soy culto, yo leo, pero sospecho de las mujeres músicas y sus habilidades con los instrumentos, aunque mis amigotes roqueros hagan letras manidas y mediocres y no pasen de un la, mi, re". "Yo no soy machista, yo soy culto, yo leo", sin embargo, como crítico musical empleo la edad como un arma contra las mujeres músicas, al tiempo que destaco las virtudes corporales de Sting, a sus años (de nuevo el manido mito del madurito. interesante). "Yo no soy machista, yo soy culto, yo leo, pero  te diré que aquella es una femme fatale, la otra enseña los pechos y está loca, aquella grita demasiado cuando canta; que las mujeres no deben gritar cuando cantan, que no es femenino".

El libro que ha escrito la excomponente de Sweet Little Sister no es para todo el mundo: hace falta una predisposición a cierto entendimiento, o epifanía. Yo misma me reconozco a veces en actitudes que aborrezco y estoy en vías de desintoxicación. ¿Estoy intoxicada? Obviamente, todo el mundo vive en el patriarcado y, como del capitalismo, no es fácil escapar (recuerda Peiró al respecto las palabras del etnomusicólogo John Blacking cuando señala que la música no es más machista que la sociedad sino un reflejo). Yo misma, que soy mujer, cisgénero, blanca, que reúno muchos privilegios y estoy atenta para construir la mejor versión de mí misma, reconozco que me queda camino. Pero tengo los ojos abiertos y, para ellos, el ensayo de Peiró es luz. Con una prosa ágil, nada alambicada -que no simple-, aporta aspectos que no ofrecen otros libros musicales que yo haya leído. Así, analiza los espacios del rock  de la mano de Foucault (bambalinas, el propio escenario, la carretera...); aporta muchos nombres de pioneras en los comienzos del género y hasta nuestras adelantadas más cercanas; se apoya en expertas y expertos sobre musicología (v.gr. Sakira Ventura), antropología, filosofía; incluye testimonios propios y de otras mujeres (o personas trans: aporte este, verdaderamente valioso pues nos permite analizar cómo se recibe un tratamiento u otro dependiendo del género) o señala el veneno del canon y sus tácticas (vía Joanna Russ) para dejar fuera del mismo a las mujeres.

Palabras certeras, alentadoras, hermanas, que en principio solo se dejan un par de asuntos por resolver: la cuestión del lenguaje (¿cómo expresar, por ejemplo, que una artista es, en nuestra opinión, la mejor, incluyendo hombres y mujeres dado el masculino universalizador, y dado que el canon es masculino occidental? Y, de otro lado, el asunto de las drogas y su romantización (así cierra el apartado "Las drogas. Como las Grecas", con la propia duda), que yo aquí no responderé porque no es mi libro (LOL).

Y, a la vez, palabras oscuras, porque señalan que todavía queda mucho por hacer. ¿En serio? ¿Frisando ya el cuarto del siglo XXI? ¿Cuánto queda, mami?

Cuando Juan Vitoria me invitó a tocar en 2022 en una de las fiestas por los 20 años de Discos Ámsterdam, enseguida pensé en hacer versiones de mujeres o de bandas con paridad (no suelo incluir covers en mi repertorio pero era condición sine qua non). No me costó nada diseñar el setlist pues, aunque me he criado con el canon masculino, lo he ido ampliando desde la adolescencia (cuando comencé a descubrir  mis propios referentes, tan necesarios para Peiró, en mi caso: 4 Non Blondes, Björk, Tori Amos, Alanis Morissette, PJ Harvey o Ani Di Franco); al final, escucho muchas mujeres. Siempre he pensando que, en escritura, en música, en general en todas las artes, como lo interesante y disidente sucede al margen, lo más auténtico era obra de mujer. Así, salí actuar a la guitarra (Roberto Timón a los tambores), con un breve repertorio de canciones de otras: Angel Olsen, Arcade Fire (Régine Chassagne a la voz), Pixies (a la voz, Kim Deal) o Beach House. Llevaba los brazos al aire, que sirvieron de lienzo pues me los llené de nombres de mujeres escritos con rotulador. Las mujeres que en ese momento caí en que habían sido mis referentes, también Cecilia. Quise aprovechar esa noche y ese lugar, sin tener demasiada certeza de la transcendencia de nada, para reivindicarlas.

El estupendo ensayo de Monty Peiró reivindica también el trabajo de las mujeres músicas, aunque parece que la solución que ve la autora es que el canon se abra a ellas, a nosotras, no que nosotras entremos virulentamente a destruirlo.  Sea como sea, no es un libro para todo el mundo; no para ti, si sostienes que no eres machista, que lees, que eres culto.
Y, ahora, contesta, tú, que amas la música y que tienes una banda: ¿cuántas instrumentistas te han formado? ¿Cuál es tu música de cabecera? ¿Cuántas versiones de mujeres incluyes en tu repertorio?  
Ah, tal vez tú también necesites este libro porque el canon, como los Reyes (como el dinero -seguimos aquí a Noah Harari-), somos y lo hacemos todo el mundo.


1. Libro de Monty Peiró, mas que subrayado.


2. Fiesta por los 20 años de Discos Ámsterdam en 16 Toneladas.



3. Reseña de un bolo en el que se aprecia que parezco buena y luego soy gritona.


4. Foto en el camerino del Loco Club, fiesta Exile SH Magazine, 2023.


5. Una de tantas pintadas que debo visualizar en los camerinos del Loco Club (las hay en todos los garitos).

6. "Reparación" de la imagen anterior. Si llevo rotu, intervengo alguna (siempre hay representaciones de penes y testículos en los backstage. Mis alumnos de 12 años también los dibujan en paredes y mesas del instituto.




martes, diciembre 19, 2023

"UNA A UNA": "POPALINA" EN LA REVISTA VERLANGA

Los amigos de la revista Verlanga nos han invitado a hablar de cada una de las canciones de  nuestro nuevo álbum, Popalina.

Agradecidas.

miércoles, septiembre 06, 2023

Carolina Otero & The Someone Elses - Una foto de Man Ray (NUEVO VIDEOCLIP)


Hoy hemos estrenado el videoclip para "Una foto de Man Ray", el tercer adelanto de nuestro nuevo disco Popalina. Está maravillosamente protagonizado por el actor Manu Badenes y realizado por Panque Prods en la librería La Rossa de Benimaclet, Valencia.

¡Esperamos que os guste!

viernes, junio 02, 2023

"POPALINA" EN EFE EME

Maravillosa crítica de Popalina por César Campoy en Efe Eme.

Espero que os guste tanto como a mí. Además, hace un repaso de otros discos y hermana Popalina con Diastema Girls.

martes, mayo 23, 2023

"POPALINA" SONANDO EN "TODOS LOS DISCOS SON GRANDES" DE JULIO RUIZ

Julio Ruiz me invita a su nuevo lugar en Subterfuge Radio para charlar sobre el estreno de "Popalina". Sin duda, una charla medicinal.

¡Agradecida!

Enlace al podcast número 63 dedicado a "Popalina, medicina pop".